Tuesday, December 11, 2007

Despertar Nuevamente

Lo primero que sintió fue cierta molestia en su pie derecho. Inicialmente, no le dió importancia; pero cuando el hormigueo pasó a ambos pies, abrió los ojos. Estaba tendido de espaldas en una habitación en sombras y no se escuchaba sonido alguno en todo aquel lugar. Parecía estar solo. Pasó mucho tiempo y sus ojos se iban acomodando a la oscuridad. Lentamente movió un brazo y sus dedos tropezaron con algo blando que cubria su cuerpo y su rostro. Entonces hubo un ruido muy alto que llenó toda la habitación. Alguien intentaba mover algo bastante pesado, a poca distancia del sitio donde se encontraba y hasta podia escuchar algunas voces, aunque casi no entendía con claridad lo que hablaban. El hombre levantó un poco la cabeza y gritó con todas sus fuerzas: "Hola, estoy aquí", a lo que enseguida respondió un voz, en su misma lengua: " Ya casi llegamos, Maestro" .